En el año 711 un ejército musulmán invadió la Península Ibérica y la conquistó; en 1492, los Reyes Católicos de Aragón y Castilla tomaron Granada, último estado musulmán independiente de la Península; y entre estas dos fechas, el poder político fue pasando lentamente de manos musulmanas a manos cristianas. Este traspaso, normalmente llamado la Reconquista, es el tema del presente libro. No me propongo por tanto describir todo lo que ocurrió en la España medieval, ni el proceso de reunificación política (incompleto hasta 1580), ni aquel otro por el que muchos, quizá la mayoría, de los peninsulares abandonaron el cristianismo para convertirse al Islam y luego volvieron al cristianismo (proceso sólo nominalmente acabado en 1526). Estas últimas materias, aunque importantes, no se mencionarán aquí más que en la medida en que afecten al tema central de la Reconquista política, y, al igual que las reformas cluniacenses, las traducciones de textos científicos, el comercio de la lana de Castilla y la expansión catalana por el Mediterráneo, no recibirán la consideración que sería de rigor en cualquier historia de la España medieval.
